La candidata socialista al Congreso por la provincia y secretaria general del PSOE de Córdoba, Rafi Crespín, ha puesto en valor la primera ley antigitanismo del ordenamiento nacional que lo tipifica como delito de odio específico y que fue aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez en 2022 dentro de la Ley de Igualdad de Trato y no Discriminación conocida como Ley Zerolo.
En una visita realiza a la sede de la Asociación de Mujeres Gitanas de Córdoba Fakali en Moreras, Crespín ha subrayado que “la ley antigitanismo supone otro gran avance en la defensa de los derechos de las personas y tiene, una vez más, el sello socialista”, al tiempo que ha defendido que se ha cumplido “con una deuda histórica con el pueblo gitano que al fin encuentra en la normativa vigente un reconocimiento a la discriminación sufrida en el pasado, así como una protección específica brindada por los tribunales y el código penal”, en alusión a las sanciones que van desde los 300 a los 500.000 euros y las penas de entre uno y cuatro años por los delitos de odio o discriminación al colectivo.
Crespín ha apostado por seguir avanzado “desde un Gobierno de progreso por la inclusión sin estigmas del pueblo gitano en nuestra sociedad y hacerla más diversa e igualitaria” y ha valorado la función de entidades como Upre Romnja, integrada en Fakali y que preside Carmen Carrillo, en beneficio de las mujeres gitanas que, por su condición de etnia, sufren una doble discriminación, como sucede por ejemplo en Moreras, Palmeras o Los Mochos, en Almodóvar del Río, emplazamientos donde reside una mayor población de personas gitanas.
La socialista también ha destacado otras acciones para impulsar la primera estrategia civil en la política española y en el ámbito municipal para aplicar un protocolo dirigido a la prevención de las situaciones antigitanas y violentas que se han producido a lo largo de la historia en distintos municipios de Andalucía, y hacerlo desde el ámbito local de los ayuntamientos, como persigue el acuerdo firmado por la Federación de Municipios y Provincias de España con Fakali que aquí en Andalucía ha contado con el respaldo de la Delegación del Gobierno.
Crespín ha asumido las peticiones de “mayor inversión y recursos” para asociaciones de ayuda al pueblo gitano que le ha trasladado Carmen Carrillo, presidenta de Fakali Córdoba, para abordar la nueva realidad, ya que cada vez más son las propias mujeres gitanas las que demandan nuevas oportunidades de educación y de empleo gracias al gran trabajo realizado en absentismo escolar.
Precisamente, Carrillo ha afirmado que Upre Romnja o Fakali son “la principal puerta de entrada de las mujeres gitanas que vienen a solicitar formación para el empleo”, sobre todo en el ámbito digital y de manejo on line, por lo que reivindica a las administraciones “un mayor esfuerzo en refuerzo escolar para dar continuidad a la formación de las niñas gitanas una vez que llegan al instituto”, así como para dar soluciones a los problemas de vivienda o acceso a los servicios públicos en los barrios donde residen mayoritariamente, con menor renta per cápita y en las primeras posiciones en cuanto a pobreza.