La parlamentaria por el PSOE de Córdoba Ana Romero ha acusado al PP de “querer embarrar el terreno de juego de las Elecciones Municipales del 28 de Mayo con falacias y mentiras sobre la PAC”, un programa de ayudas que la socialista ha defendido “por ser más justa, social, redistributiva y primar al pequeño y mediano agricultor frente a las grandes explotaciones a las que le pone tope en la percepción de cuantía, y que son precisamente las que protege y ampara el PP, a 338 grandes perceptores a los que rechaza topar y que son el 0,15% de los 222.269 beneficiarios de la PAC en Andalucía”.
Romero ha insistido en que el Gobierno de Moreno Bonilla repite en la PAC el mismo modelo que ya instauró para perdonarle el impuesto de patrimonio al 0,2 de la población andaluza con grandes fortunas “porque su gobierno y sus medidas son para los que más tienen”. “Lo mismo hace con la PAC, en la que se ha posicionado en contra de que la ayuda básica a la renta esté limitada al año por beneficiario por primera vez en España, lo que hará que el importe máximo a percibir no podrá superar los 200.000 euros descontando los costes salariales”, ha explicado.
“¿Saben de qué se acuerdan los consejeros y consejeras andaluces cuando hablan de la posición de Andalucía? De que no se debe poner un límite de 200.000 euros por perceptor porque eso repercutiría negativamente en 338 de los 222.269 beneficiarios de la PAC contabilizados en Andalucía”, sostuvo Romero, quien reprochó que “la preocupación exclusiva del Gobierno de Moreno Bonilla fuese ese 0,15% de agricultores cuando el 75% de los perceptores de la PAC en Andalucía cobran menos de 5.000 euros”.
Aún con el nuevo sistema de reparto, Romero aseguró que “Andalucía va a continuar siendo la comunidad autónoma más beneficiada por la política agrícola en España” y que los pequeños y medianos agricultores y ganaderos profesionales “se van a ver beneficiados con el nuevo pago redistributivo, que es muy positivo para Andalucía, ya que supondrá una sexta parte del presupuesto de la ayuda básica a la renta, es decir, el 10 % del total de ayudas directas”.
La socialista aseveró que “el PSOE siempre va a estar del lado de los pequeños y medianos agricultores defendiéndolos y velando por los intereses del campo andaluz” y puso en valor que desde el 1 de enero “tenemos en España una nueva PAC en vigor para el período 2023-2027 mientras hay países que aún no la han puesto en funcionamiento y sus agricultores tienen la incertidumbre de si la cobrarán o no”.
Sí consideró que “estamos ante una PAC compleja, porque ha sido un cambio grande que ha planteado la Unión Europea al que nos tenemos que adaptar, pero que es beneficiosa para Andalucía por varios motivos; primero, seguiremos siendo la comunidad que más fondos recibirá de toda España; y segundo, porque se está primando a la agricultura familiar y profesional, que es muy importante en muchos municipios de nuestra provincia y de Andalucía, y por primera vez habrá una política redistributiva para las pequeñas y medianas explotaciones”.
“Sabemos que al PP y a alguna organización agraria esto no les gusta, como tampoco le gusta a la derecha que se ponga un tope al máximo de subvención que se recibe, a partir de los 60.000 euros se va a ir cobrando menos hasta los 100.000, con un límite de 200.000 euros para las grandes explotaciones descontando los costes salariales”, puntualizó la parlamentaria, quien dijo que “desde el PSOE planteamos que ese tope se redistribuya entre las medianas y pequeñas empresas, que necesitan más de esa ayuda”.
Además, destacó que “por primera vez se darán ayudas directas al olivar tradicional”, así como “el aumento de un 15% al ovino y al caprino, los ecorregímenes, y también la inclusión de perspectiva de género en la política agraria comunitaria con una inversión de 220 millones de euros todos los años para la incorporación de jóvenes y mujeres para favorecer el relevo generacional”. “Mientras tanto, la Junta de Andalucía ha sacado una sola convocatoria de relevo generacional y que aún está sin resolver después de 4 años”, apostilló.