El Grupo Municipal Socialista ha denunciado hoy que el gobierno que preside José María Bellido sigue engañando al pequeño comercio y a l@s cordobes@s al anunciar una y otra vez unas ayudas que nunca llegan.
La concejala Carmen Victoria Campos ha mostrado su indignación por el nuevo anuncio realizado el pasado domingo desde el equipo de gobierno: van a sacar a licitación el diseño de la plataforma digital que se necesita para solicitar y cobrar los bonos de descuento.
“No salimos de nuestro asombro con el alcalde y su equipo. Anuncian que ya han realizado los pliegos de contratación como una gran noticia, como si nadie supiera que van ¡con dos años de retraso!”.
El gobierno de PP y Cs prometió poner en marcha este bono en enero del año pasado. Después dijeron que lo activaría en junio de este año, pero tampoco ha ocurrido. La última fecha que dieron, antes de anunciar la licitación de la plataforma, fue otoño. Ahora aseguran que estará lista para finales de año.
“Tanto comerciantes como compradores llevan más de dos años esperando a que el alcalde ponga en marcha estos descuentos que anunció en plena pandemia. ¿El señor Bellido se ha tomado la molestia de hablar con los propietarios de estos negocios para saber lo mal que lo están pasando por no recibir ayudas de su ayuntamiento?”, preguntaba Campos.
En noviembre de 2020 todos los grupos políticos firmaron un acuerdo de uso de los ahorros municipales de 2019 en el que se destinaban 500.000 euros al Bono 10. Cinco meses después, a propuesta de los socialistas, se sumaron otros 500.000 euros en virtud del acuerdo de remanentes del año 2020. Este dinero tenía fecha de caducidad: el 31 de diciembre de 2021, pero no se gastó.
Como recuerda la edil del PSOE, “en dos años no han gastado ni un euro del millón que se había dispuesto para este fin y encima sacaron pecho diciendo que sumarían otros 400.000”.
Y ha concluido asegurando que “cuando llegue el bono, si finalmente llega, será demasiado tarde para muchos autónomos y pequeñas empresas que han tenido que cerrar sus negocios. En muchas ciudades españolas se desarrolló esta medida con mucho éxito tras los primeros meses de alerta sanitaria pero aquí no ha sido así porque, simplemente, no ha habido voluntad política de hacerlo”.